Nadie se salva

Sebastián Abreu fue robado en Montevideo, y entre las cosas que le sustrajeron estaba la cámara, esa que lleva a todos lados y en la que había varias imágenes de la selección y del juego con Venezuela. El Loco pretende recompensar a quien haga la devolución, principalmente de las imágenes.

La alegría va por barrios y la inseguridad también. El Loco, quien está trabajando con la selección, se encontraba en Pocitos, junto a Martín Cáceres. Cuando regresó a su camioneta, ésta tenía un vidrio roto, y cuando revisó el interior de la misma se encontró con la ausencia de un reloj Rolex y de dinero.
Pero lo que más lamentó el minuano fue la falta de su cámara filmadora, esa con la que siempre se lo ve bajar y subir de los ómnibus e incluso entrar a la cancha con la selección, con la que recoge imágenes para archivo personal y para guardar así un recuerdo de todo lo que le toca vivir.
La pérdida de las imágenes es lo que pretende revertir Abreu, quien hizo la denuncia correspondiente pero ofrece además recompensa por la devolución de las mismas, ya que es un material que obviamente no tiene forma de ser repuesta.
Casi un año atrás, Diego Lugano fue robado de la misma manera. Rompieron un vidrio de su vehículo y se llevaron las cosas, pero cuando los ladrones se dieron cuenta que pertenecían al capitán de la selección, le devolvieron todo.

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