"Estudié la historia de los entrenadores"

"Estoy en el vestuario, llamáme en 20` ", decía el mensaje del "Loco"; y no falló, como de costumbre, aunque está en Río, entrando a la pretemporada con Botafogo y "vivo en la otra punta...normalmente, llego en unos 25`, pero hoy hay más tránsito, puedo poner más de una hora".

JORGE SAVIA

-¿Cómo toma esto de estar 10°, o 3°, en el ranking mundial de los goleadores?
-No entiendo por qué sólo se contabilizan los goles de ligas; no se cuentan Copa América, Copa del Mundo, Sudamericana, Libertadores, Liguilla, Campeonato Carioca… pero es un gran orgullo. Además, si uno mira la lista, de los que juegan en las cuatro ligas más importantes (Italia, Eapaña, Inglaterra y Alemania), sólo hay dos o tres (jugadores) que están por delante de mí. No es poco.
-A su edad, además, por lo general, los goleadores suelen tirarse más atrás, a rebuscarse en otra, sin depender tanto de los goles. Usted no afloja.
-Es que hubo cosas que me ayudaron mucho.
-¿Cuáles, por ejemplo?
-Estar en equipos que tienen como prioridad atacar. Eso es fundamental. Si me hubieran tocado equipos que juegan 4-4-1-1 y de contragolpe, habría sido muy difícil hacer tantos goles. A mi me potencian al máximo los equipos que atacan, los equipos que proponen. Lo otro que me ha beneficiado es que el fútbol progresó mucho en cuanto a la metodología del entrenamiento y eso me sirvió para estar a pleno hasta ahora. No siempre se da que un jugador de 35 años vaya a renovar el contrato y le propongan, como a mí, firmar por dos años y medio más. Normalmente te dicen: `Bueno… un año con opción a otro`.
-Ud. dice que lo ha favorecido jugar en equipos con propuestas ofensivas; ¿los eligió o se le dio por fortuna?
-No, no, siempre me gustó elegir por las características del equipo al que podía ir, y también estudiar la historia del entrenador; porque yo podía hablar con el entrenador, pero capaz que él me decía que jugaba de una manera y después jugaba de otra.
-¿Lo hizo siempre?
-Después de lo que me pasó en La Coruña: yo llegué en la segunda rueda, el equipo estaba en posición de descenso y jugaba 4-4-1-1. Así no pude hacer muchos goles y el entrenador que vino después se basó en las estadísticas; vio: jugó 18 partidos e hizo 4 goles... no me iba a tener en cuenta, obvio.
-¿El mejor gol? O los mejores…
-Así, rápido… el gol a Costa Rica que valió la clasificación al Mundial; el penal a Ghana, lógico; el 2° a Bolivia cuando empatamos 2 a 2 en La Paz después de estar perdiendo 2 a 0 en la altura; un gol que le hice al Santos, que por factura técnica fue muy lindo; el penal en el que la "pinché", contra Flamengo en la final del campeonato carioca; y dos con San Lorenzo: uno contra Huracán y otro a Racing, que gambetée a cuatro y la "pinché" cuando salió el golero.
-¿El arquero más difícil?
-No sé si goleros, pero sí equipos. En Argentina, por ejemplo, a River no le he podido hacer goles. A la selección argentina tampoco. Acá en Brasil, Palmeiras; y arquero... el que se me hizo difícil, aunque en un partido solo, fue el "Nacho" González. ¿Te acordás de Uruguay-Argentina en el estadio, 0 a 0 por las Eliminatorias para el 98?
-Y al revés... ¿arqueros o equipos a los que les ha hecho más goles?
-Acá, Vasco (da Gama) es uno. Con Botafogo es un clásico y siempre pude hacer goles. En México le hice muchos al Pachuca. Y en Argentina al que más goles le metí fue a Boca.
-Bueno, gracias...
-¡Aahhh! ¡Pará! ¡Pará!
-¿Qué?
-Me olvidé del gol del clásico.
-¿Cuál?
-El del 3 a 2 del minuto 92 del clásico del 2004. ¿Te acordás? Íbamos perdiendo 2 a 0 faltando 15`, el "Lucho" Romero hizo dos goles y yo en el minuto 92 metí el otro. Por favor, no te olvides de éste, ponélo. Je, je, acá también lo meto en la hora.