miércoles, 21 de marzo de 2012

De no creer

Liverpool le ganaba 2-0 a Queens Park Rangers, y terminó perdiendo 3-2. Sebastián Coates, quien comenzó como suplente, abrió la cuenta con una exquisita tijera que dejó a todos de boca abierta. Dirk Kuyt puso el segundo, Luis Suárez fue sustituido por Andy Carroll, y en los últimos minutos se vino la noche. 
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Liverpool sufrió una derrota increíble, la más notoria en los últimos tiempos, ante Queens Park Rangers, equipo que está peleando por no descender, y el sueño de clasificar a la Champions League parece cada vez más una utopía.
Con Luis Suárez en la delantera, y con la esperanza de sus compañeros de que convirtiera tras hacerlo ante Stoke City por la FA Cup, el primer tiempo terminó sin goles, con varias llegadas riesgosas pero mal definidas o desviadas por parte del atacante charrúa, que no logró convertir.
Sebastián Coates, quien comenzó en el banco, tuvo que saltar a la cancha a los 34 minutos, por la lesión de Martin Kelly, y se convertiría, por algunos minutos, en la figura destacada del equipo rojo. También por lesión tuvo que dejar la cancha Charlie Adam, en el entretiempo.
El marcador se abrió a los 54 minutos. Tras una carambola en el área y un gol fallado por Downing, el defensa, presente en el área, sacó una tijera impecable en el área y marcó un golazo, que dejó de boca abierta a todos, incluso a él mismo, y que de inmediato tuvo repercusión en las redes sociales con adjetivos positivos.
Liverpool sufrió una derrota increíble, la más notoria en los últimos tiempos, ante Queens Park Rangers, equipo que está peleando por no descender, y el sueño de clasificar a la Champions League parece cada vez más una utopía.
Con Luis Suárez en la delantera, y con la esperanza de sus compañeros de que convirtiera tras hacerlo ante Stoke City por la FA Cup, el primer tiempo terminó sin goles, con varias llegadas riesgosas pero mal definidas o desviadas por parte del atacante charrúa, que no logró convertir.
Sebastián Coates, quien comenzó en el banco, tuvo que saltar a la cancha a los 34 minutos, por la lesión de Martin Kelly, y se convertiría, por algunos minutos, en la figura destacada del equipo rojo. También por lesión tuvo que dejar la cancha Charlie Adam, en el entretiempo.
El marcador se abrió a los 54 minutos. Tras una carambola en el área y un gol fallado por Downing, el defensa, presente en el área, sacó una tijera impecable en el área y marcó un golazo, que dejó de boca abierta a todos, incluso a él mismo, y que de inmediato tuvo repercusión en las redes sociales con adjetivos positivos.


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