Sebastián Abreu entrenó diferenciado en Botafogo tras un desgarro en un aductor. El Loco se enteró del grado de su lesión cuatro días después de sufrirla, y cree que puede jugar el jueves ante Fluminense en la semifinal de la Taça Guanabara porque "hay aspectos psicológicos que son superiores a la lesión y hacen que uno intente y pueda".
Sebastián Abreu se perdió de desfilar en el Carnaval de Río por la lesión que también lo tuvo al margen del último encuentro de Botafogo por la Taça Guanabara. "Estoy haciendo fisioterapia y con hielo esperando la evolución de la lesión y haciendo horas extras para volver lo más rápido posible", dijo al programa A Fondo de 1010 AM, confirmando que padeció "un desgarro de segundo grado en el aductor derecho". Claro que fue curiosa la forma en que se enteró de lo que tenía en la pierna. "Seguramente me lesioné el domingo tras el partido. Tenía una molestia, pero como nunca había sufrido un solo problema muscular en toda mi carrera, pequé de inexperiencia y fui a entrenar normalmente al otro día. Con las prácticas el dolor siguió incrementando hasta que el jueves me hicieron una resonancia magnética, porque no podía arrastrar una misma molestia tantos días, y salió la rotura de grado dos. Ahí empecé a trabajar diferenciado".
Normalmente un desgarro implica una inactividad de aproximadamente 20 días, dependiendo del grado. Sin embargo, el Loco confiesa que "no me puedo permitir no intentar jugar contra Fluminense" en la semifinal de la Taça Guanabara el próximo jueves. "Mi cuerpo reaccionará de acuerdo a la tolerancia al dolor. Hay aspectos psicológicos que son superiores a la lesión. Obviamente si uno está quebrado, aunque piense en positivo no puede jugar, pero hay mecanismos que genera la mentalidad positiva que hacen que uno intente y pueda", dijo.
Abreu comentó que "en la cabeza del entrenador está la posibilidad de que yo juegue" y que "haré lo posible para estar en ese clásico que además es un partido decisivo como toda semifinal". Si logra estar a la orden, tampoco descarta jugar para la selección uruguaya en Bucarest ante Rumania el 29. "El cuerpo técnico y médico están en contacto. Hoy mi meta es jugar el jueves. Si lo logro y no me resiento, obviamente estaré apto para participar en la selección. Quiera la Virgen del Verdú que pueda cumplir con ese partido, y por consecuencia estar en Rumania", concluyó el Loco.
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