Sabor a nada

Milan y Napoli no cumplieron con las expectativas que se habían depositado en este encuentro, y protagonizaron un partido con muchas agresiones y faltas, en el que el rossonero atacó y el celeste se dedicó a defender y a buscar el arco de contragolpe. Ibrahimovic se fue expulsado, y el Mota Gargano recibió un fuerte golpe la cabeza.

Tras la postergación de los partidos planificados para el sábado en Italia, este domingo se completó una jornada cargada de actividad, pero también de desilusión. El partido más promisorio de la fecha, el que protagonizaron Milan y Napoli y que tenía en cancha a dos de los goleadores más destacados de la Serie A, terminó sin goles.
El rossonero fue superior, y eso se notó desde el primer hasta el último minuto, incluso cuando el equipo quedó con 10 hombres por la expulsión de Zlatan Ibrahimovic, quien a los 64 minutos de juego aprovechó una discusión grupal para escudarse detrás de un compañero y darle un tortazo a Salvatore Aronica.
El local llevó las riendas del cotejo, pero se topó siempre con un buen trabajo defensivo de los visitantes, que se dedicaron básicamente a defender y a cortar los toqueteos de balón del rival. Incluso se lo vio en varias oportunidades a Edinson Cavani colaborando con la línea de fondo de su equipo, lo que refleja la característica principal de un encuentro que fue muy cortado por las faltas y muy caliente.
Con Walter Gargano y el delantero como uruguayos titulares, y con Miguel Britos en el banco, Napoli procuró que De Sanctis mantuviera el cero en el arco, y sumó un punto que no sirve demasiado, tampoco para el oponente.
El Mota fue protagonista de una complicada jugada. Saltó a cabecear un balón, y Clarence Seedorf depositó todos los tapones de su zapato en la cabeza del charrúa, que cayó al piso muy sentido. El juez sólo mostró amarilla al jugador de Milan, y el mediocampista debió salir para recibir asistencia médica. Finalmente no pasó a mayores el golpe, y pudo completar los 90 minutos de juego sin problemas, y nuevamente con buen rendimiento.
Así, el club milanés quedó a un punto del líder, Juventus, que con el empate sin goles ante Udinese se alzó con 45 unidades y la punta. Martín Cáceres no estuvo ni siquiera en el banco.
Encuentro protagonista fue el de Roma-Inter, que debería haberse jugado el sábado y tuvo que ser aplazado por las malas condiciones meteorológicas. Con Diego Forlán fuera de la convocatoria (retomó los entrenamientos hace pocos días, tras la segunda lesión), el nerazzurro fue vapuleado por el equipo capitalino, que se impuso por 4-0.
Juan, Fabio Borini en dos ocasiones y Bojan Krkic fueron los autores de los goles que volvieron a sacudir anímicamente al club que dirige Claudio Ranieri, que no encuentra la regularidad.
El que continúa en ascenso, Genoa, superó por 3-2 a Lazio. El local comenzó ganando por 3-0, la visita descontó y en la hora llegó el segundo tanto, de autoría de Álvaro González. El Tata, titular, definió con la derecha para aproximar a su equipo al empate, pero no fue suficiente.
No estuvo presente el Pollo Olivera en Fiorentina, pero los de casaca violeta concretaron dos penales que les permitieron darle vuelta el partido a Udinese, para ganarlo por 3-2. Parma venció por 2-1 a Chievo Verona como visitante, y Lecce y Bologna empataron sin tantos. Guillermo Giacomazzi estuvo en cancha para el giallorosso, y Carlos Grosmüller permaneció entre los suplentes, mientras que el Ruso Pérez y Gastón Ramírez jugaron desde el inicio en el rossoblú.
Caglari, con Pablo Cepellini en el banco, igualó sin convertir ante Novara, y Palermo, con el Vasquito Aguirregaray viendo de afuera y sin Abel Hernández de regreso, derrotó a Atalanta por 2-1.