Se les fue la mano

Alex Ferguson, entrenador de Manchester United, dijo que Luis Suárez es "una vergüenza" para Liverpool, y Kenny Dalglish, su técnico salió a defender al uruguayo. Pero además de otras críticas que han caído sobre el uruguayo, la policía incautó mercadería de muy mal gusto de los hinchas locales, que ironizaron con el salteño y el Ku Klux Klan.

Las repercusiones del partido entre Manchester United y Liverpool en Old Trafford por la Premier League se han sucedido, fundamentalmente en torno al 'no saludo' entre Luis Suárez y Patrice Evra, hablando poco y nada de los exagerados ademanes de celebración realizados por el francés una vez finalizado el encuentro, en el que su equipo salió victorioso por 2-1 y en el que marcó el uruguayo.
El entrenador del United, Sir Alex Ferguson, consideró, en brutales declaraciones, que Suárez "es una desgracia para el Liverpool. No tendría que jugar nunca más por ellos". Además, criticó su actitud, la cual "generó una atmósfera terrible y pudo haber ocasionado un motín". "Debería estar avergonzado", disparó.
En el banquillo del otro lado, Kenny Dalglish se mostró comprensivo con su jugador, a pesar de que días atrás había asegurado que éste saludaría al francés porque la situación ya se había hablado en las prácticas. El técnico dijo no haber visto el 'no saludo' entre los jugadores, y declaró a Sky Sport que la prensa ha sido muy "severa" con el delantero, quien "no es responsable de lo que pasó hoy".
Todas las voces, todas
El responsable de la Asociación de Futbolistas Profesionales de Inglaterra (PFA), Gordon Taylor, habló con Sky Sport tras el partido, y declaró que "estábamos esperando con entusiasmo el apropiado apretón de manos que pusiera el punto final a esto", pero que el hecho de que no haya sucedido los desilusionó.
"Pero en todo caso, la manera en que él (en referencia a Suárez) rechazó el saludo, exacerbó la situación y la inflamó", aseguró el dirigente. "Es particularmente decepcionante y lamentable, por supuesto. Es algo que no podemos ignorar si buscamos el éxito en nuestra batalla contra el racismo", advirtió.
Gary Neville habló con el mismo medio, y dijo que es "obvio que Suárez evitó a Evra". "No estoy seguro de que haya sido la cosa más sabia que haya hecho, no estoy seguro de que haya ayudado a su club. Creo que Kenny Dalglish quedó en una situación después del partido en la que deberá salir a defenderlo otra vez", ironizó.
Excesivo
En lo previo al encuentro, la policía local requisó el fanzine Red Issue, una suerte de revista de la hinchada de los diablos rojos, porque en su tapa mostraban una imagen que no puede ser más que calificada como aberrante.
En la misma, se imprimió una imagen tamaño real de una máscara de las que usaba el Ku Klux Klan, histórica organización que se dedicó a expresar pública y violentamente el racismo, alabando la supremacía de la raza blanca y persiguiendo a los de la negra hasta el cansancio, quemando pertenencias e incluso matando personas.
El dibujo se puede recortar, lo que invitaba a los hinchas a que ingresaran a la cancha con esta máscara puesta en su cara. El retrato venía acompañado de la irónica leyenda "Suárez is innocent" ("Suárez es inocente").
El responsable del operativo de seguridad del partido, Mark Roberts, declaró a la prensa que "poco antes del pitazo inicial fuimos avisados de que el fanzine de los hinchas de Manchester United que estaba siendo vendido fuera del estadio tenía una imagen potencialmente ofensiva". Además, advirtieron que también se estaban comercializando remeras con imágenes poco agradables, aunque se desconoce si se trata del mismo diseño. Por la venta de estas prendas, un hombre fue arrestado.
"Tomo esto como que ambos elementos son potencialmente ofensivos, y no podemos estar así en una situación donde cientos o miles de personas están manejando imágenes ofensivas en un partido de fútbol. Las consecuencias de actuar podrían haber devenido en incidentes públicos dentro y fuera de la cancha", explicó el comisario.