"Traté de olvidarme de todo y ayudar al equipo"

Un día después de volver a las chanchas, Luis Suárez aseguró que "fue muy duro" estar "todo este tiempo sin jugar" y reconoció que la ansiedad de "querer hacer todo desde el primer minuto" ante los Spurs le jugó "en contra".

En diálogo con Radio Sport 890, el uruguayo indicó que "No disfruté del volver a jugar y estar adentro de la cancha, sino que pensé más en querer hacer algo para el equipo. Si hubiera pensado más en lo que me pasó en los últimos meses hubiera sido más difícil, así que traté de olvidarme de todo y ayudar al equipo".

Suárez se mostró muy "agradecido" con el comportamiento de la gente para con su persona, "no sólo en la cancha sino en la calle". Suárez aseguró que los fanáticos del Liverpool le demostraron un "cariño" único y que durante el partido de ayer "quedó demostrado el aprecio" que le tienen. "Me siento muy cómodo", indicó.

En diálogo con la Sport, Suárez indicó que sabía que lo "iban a mirar diferente".
"Ayer me pasó algo único: salí a calentar y tenía tres cámaras alrededor mío. Estaba en el banco y todas las cámaras me apuntaban a mí. Uno se siente observado pero tiene que pagar por todo el tema de la penalización. Por suerte volví a jugar, que era lo que estaba esperando todo este tiempo", subrayó.
Suárez indicó que "siempre" fue de "protestar mucho y hacer mucho gesto", pero aseguró que de ahora en más, sintiéndose "tan observado", va a "tratar de mejorar esos aspectos sin perder lo futbolístico".
Tras el partido, Suárez resaltó lo positivo de la suspensión e indicó como primer punto el apoyo de sus compañeros. "Mis compañeros, muchos de ellos de raza negra, nacidos en Surinam, salieron todos a defenderme y me dijeron que no me preocupara. Lo mismo que otro que fue compañero en el Groningen y me sentí apoyado por ellos y por toda la gente que me rodea. En ningún momento me bajoneé porque mi consciencia estaba tranquila porque sabía cómo habían sido las cosas. Como dice la ley del jugador: las cosas de adentro de la cancha quedan en la cancha y se terminan ahí".
Ayer, el estadio de Anfield estalló a los 65 minutos cuando el técnico Kenny Dalglish hizo ingresar a Luis Suárez que no jugaba en el Liverpool desde el pasado 26 de diciembre.
Suárez vivió intensamente los 29` minutos que estuvo en cancha. El público coreó su nombre. Los primeros planos fueron para él, por figura y hombre capaz de quebrar la igualdad.
En las tribunas sobresalió una pancarta: "El show de Luis Suárez", acompañada con un número 7 enorme.
El delantero no brilló, pero tuvo presencia peligrosa por los costados y en el área. Le falto más tranquilidad y espacios para meter la pelota adentro del arco.
El próximo sábado, a las 10.45 horas de Uruguay, Luis Suárez enfrentará con el Liverpool al equipo de Evra, el Manchester United. En diálogo con Radio Sport, el delantero aseguró que habrá "un morbo muy especial, pero estoy bastante acostumbrado a que me chiflen en todos los estadios. Ahí puede que haya algún chiflido y algún grito más, pero nada raro. Primero que nada tengo que ver si juego de titular, y después trataré de olvidarme de todo y hacer el juego que a mí me gusta. No es la primera vez que me van a chiflar y que van a querer hacerme sentir incómodo. Cuanto más me chiflen, mejor me voy a sentir".