A tiro

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Juventus se volvió a prender en la lucha por el título y aprovechó el empate a uno del Milan el sábado en su visita a Catania, para ponérsele a dos puntos restando ocho fechas. La Vecchia Signora arrolló a un Napoli desconocido, que se limitó a defenderse y que sigue en el cuarto lugar a tres puntos de Lazio, su próximo rival el sábado que viene en un duelo clave por ese tercer puesto que clasifica a la próxima Champions League. En el arranque fue todo de la Juve, que salió a jugar como el equipo grande necesitado de los puntos. Ya a los 5’ tuvo la primera, con un centro de Pirlo desde la izquierda que cruzó el área chica sin que nadie lo interceptara. El conjunto que esta tarde vistió casaca rosa abrió la cancha con Arturo Vidal por derecha y Paolo De Ceglie por izquierda, siempre teniendo a Pirlo como eje. El experimentado campeón del mundo administró notablemente el balón y manejó los hilos del equipo. A Napoli parecía servirle la igualdad, ya que no proponía nada en materia ofensiva. Las pocas veces que el esférico llegó arriba, el mejor fue Lavezzi, quien ejecutó un tiro libre por arriba del horizontal a los 38’ en la única aproximación celeste en la primera mitad, luego de una falta que le cometió Vidal. El chileno, minutos antes, le pegó un codazo a Gargano disputando un balón en la mitad de la cancha, y si bien el Mota quedó sentido durante algunos segundos, el dolor no le impidió comerse la cancha. Otra vez, el sanducero fue de los más destacados de Napoli y cumplió una buena labor a pesar de la derrota. ¿Cavani? No le llegó una pelota en todo el partido. Aguantaban bien atrás los dirigidos por Walter Mazzarri, y su línea de tres defensores se las ingenió para absorber a Borrielo, referencia de área del dueño de casa. Sin embargo, la ambición de uno y la poca generosidad del otro con el espectáculo tuvieron sus premios y castigos correspondientes. Tras un tiro libre apareció el zaguero Leonardo Bonucci capitalizando un par de rebotes en el área para el 1-0 favorable a Juventus. Tras ese tanto, el técnico napolitano sacó a Inler, de flojísimo partido, y puso a Pandev, quien cambió el trámite hace una semana frente a Catania pero esta vez no repitió. En el local, ingresó Martín Cáceres por el amonestado Lichtsteiner, buscando evitar sorpresas y darle más solidez a una defensa que igualmente no sufrió en toda la noche. Por si acaso, el gol de la tranquilidad lo hizo Vidal, quien fue figura. El chileno picó por izquierda, recibió de Marchisio, bailoteó con el balón ante la marca de Campagnaro, se lo sacó de encima con derecha y de zurda remató cruzado al ángulo. Golazo que liquidaba el pleito a los 75’. Ya con el baile consumado, entraron Quagliarella y Del Piero en el locatario, y entre ambos construyeron el tercero de contragolpe. Un pase del más veterano dejó a Quagliarella de cara al gol, y no perdonó a los 83’, dos minutos antes de la expulsión del colombiano Zúñiga en Napoli por un codazo en la cara a Chiellini. Montevideo Portal